Tarta genovesa de nata

Esta tarta la hice para el cumpleaños de un amigo de mis hijas, pero perfectamente la podríamos “tunear” y decorarla de forma personalizada.

Es el típico bizcocho genovés, el bizcocho “base” de muchas tartas y preparaciones en pastelería. El bizcocho genovés, tal cual, está delicioso y lo podemos hacer en forma de bizcochos o rellenar moldes para magdalenas, por ejemplo.  Con las cantidades que pongo en esta receta, sería conveniente utilizar un molde de 18cms de ancho aproximadamente, tendríamos un bizcocho más pequeño de diámetro, pero más alto y podríamos cortar el bizcocho en 3 discos. Yo no tengo de ese tamaño (de momento… jejeje… esto de la cocina es un vicio, y poco a poco voy completando mis cositas, aunque quizás ya mismo necesite una cocina más grande). El molde redondo que suelo utilizar, tiene 24cms. Queda el bizcocho más bajo de lo que resultaría si esa misma masa, se mete en uno de 18cms, pero no me importaba. El cumpleañero tenía una tarta encargada por su familia, para todos los amigos que fueron a la fiesta. Yo no quería restar protagonismo con una tarta grande, y también, particularmente, me gustan las tartas algo bajitas. ¿Qué podemos hacer si tenemos un molde como el mío, y queremos una tarta más alta? Os doy 2 opciones:

      *  Hacer el doble de masa de la indico en esta receta.
      *  Al margen de si hacemos la masa normal o con cantidades dobles, podemos aumentar bastante el volumen si, por un lado, montamos las claras a punto de nieve. Las yemas, las batiremos como se indica en la receta, procurando batirlas mucho tiempo con el azúcar, para que aumenten de volumen y quede una crema. Cuando tengamos todos los ingredientes mezclados (yemas, azúcar, harina, levadura, sal, si hemos añadido algún aroma), y las claras estén montadas a punto de nieve, con la ayuda de una lengua de silicona o cuchara de madera, vamos incorporando poco a poco las claras a toda la preparación con movimientos envolventes. Tenemos que hacerlo despacio, en pocas cantidades, y con movimientos de abajo hacia arriba, para que el aire que hemos metido tanto en la preparación de las yemas como en las claras, no se nos baje.
        * En la lista de ingredientes, he puesto levadura química tipo Royal. Se la he puesto, al hacer el bizcocho en un molde un poco más grande del recomendado. Si lo hacéis en uno de 18cms, no hace falta ya que quedará bien subido con el batido de los huevos, y sobre todo, si montáis las claras a punto de nieve.

Para este bizcocho, es imprescindible tener: una batidora con accesorio de batir o mejor aún, algún robot de cocina con el accesorio de varillas, que nos va ayudar a montar las claras y las yemas y hará que la masa aumente bastante de volumen y quede esponjosa. A mano, yo creo que es misión imposible. De todas formas, si alguien se ve con la suficiente fuerza (tener en cuenta que yo he batido en máquina, a velocidad media / alta durante aprox. 15mnts), que lo intente de forma manual. Y desde luego, se merecerá un trozo más grande de tarta al final… jajaja.

Yo he utilizado, para el relleno, una mermelada comercial de fresas, porque no tenía tiempo de ir a buscar buenas fresas y hacerla. Pero si queréis hacerla, os dejo este enlace pinchando  AQUI  Esto es totalmente opcional, como es lógico. También podríais haber utilizado, por ejemplo además de mermelada de otro sabor, una crema pastelera (os lo explico en esta receta pinchando  AQUI ). La cobertura, me he inclinado por la nata que ya teníamos montada y en la parte superior, la he espolvoreado con chocolate en polvo y le he añadido unas chuches que eran figuras de ositos de nube cubiertas de chocolate. Aquí también podemos dejar volar la imaginación y ponerle: láminas de almendras tostadas, fideos de chocolate o de colores, unas fresas naturales, mini bombones, gominolas…

Dicho todo esto, ¿te apetece que nos metamos a preparar esta Tarta Genovesa de Nata? Pues acompáñame a la cocina que lo tengo todo preparado.

Ingredientes para 6 personas aproximadamente:

Para el bizcocho:
- 4 huevos a temperatura ambiente.
- 120grs de azúcar blanco
- 60grs de harina floja + 60grs de harina de maíz (Maicena o similar). Con esto tendremos un bizcocho más ligero, pero sino tenéis harina de maíz, poner los 120grs de harina floja o de repostería.
- 4grs de sal (aproximadamente, media cucharilla de postre escasa).
- 1 cucharilla (de postre) rasa de levadura química, tipo Royal.
- Opcional, aromatizante: yo he utilizado 1 cucharilla (de postre) de agua de azahar pero podría ser vainilla líquida o canela molida, ralladura de naranja / limón…etc.

Para el relleno:
400ml de nata para montar, con un mínimo de 35% materia grasa, que tiene que estar muy fría.
Azúcar glas al gusto
Mermelada de fresa
Cacao en polvo
Ositos de chocolate

Preparación:

Precalentar el horno, con calor arriba y abajo, a temperatura alta.
Empezamos batiendo los huevos con el azúcar, durante aproximadamente, 10-12mnts a velocidad media / alta. Con esto conseguiremos aumentar bastante el volumen y obtener una crema muy esponjosa. Mientras tanto, podemos tamizar las harinas, levadura y sal y reservar.

Pasado este tiempo, ir añadiendo muy poco a poco, las harinas tamizadas sin dejar de batir. No añadir de golpe para evitar que la crema que tenemos, se baje con el peso de la harina. Cuando tengamos toda la harina incorporada, seguir batiendo a velocidad media / alta durante 5mnts aprox. más. Cuanto más batamos, más volumen tendremos en la masa y más esponjoso quedará nuestro bizcocho.
Engrasar el molde que vayamos a utilizar con mantequilla o aceite de girasol y poner en la base, un papel de hornear. Esto nos ayudará a proteger nuestros moldes, y ayudar a que nos duren más, pero también a desmoldar el bizcocho mucho más fácil. Verter la masa y meter en el horno a una altura media, a 180ºC Si utilizamos ventilador, bajar la temperatura a 160ºC para evitar que se nos queme. Tardará, según el horno y el molde que hayamos elegido, unos 30mnts. Cuando tengamos el bizcocho listo, sacar del horno y dar un golpe seco sobre la mesa. Este truco lo vi hace poco en televisión que lo daba un pastelero, y decía que evitaba que el bizcocho bajara conforme se fuera enfriando. Dejar en el mismo molde (en caliente se nos puede romper) y enfriar por completo.

Mientras que se cuece el bizcocho, podemos montar la nata. Ponerla en el recipiente donde vayamos a montarla y con las varillas a velocidad alta, empezar a batir. Cuando la tengamos medio montada, añadir azúcar glas al gusto. Yo le he añadido unas 4 cucharadas porque el bizcocho iba relleno de mermelada, que es dulce y no quería algo muy dulzón. Cuando pongamos el azúcar glas, remover un poco con las varillas a mano, para evitar que el azúcar salga volando cuando le demos con la batidora / robot de cocina. Batir hasta montarla, pero tener cuidado que, si batimos demasiado, se nos pasa la nata y podemos tener mantequilla. Una vez montada, reservar en la zona más fría de la nevera.

Una vez el bizcocho frío, vamos a partirlo para relleno. Primero marcamos con un cuchillo de sierra grande (el del pan es estupendo), el contorno a la mitad del ancho aproximadamente. Si lo hubiéramos hecho en un molde de 18cms, podríamos hacer 3 capas. En este caso, dividir el ancho del bizcocho en 3 parte. Una vez marcado el borde, meter hasta el centro el cuchillo de sierra y hacer los discos. Separar cada disco de bizcocho. Rellenar cada disco con mermelada. Podemos templar un poco la mermelada en el microondas, para que quede más líquida y sea más fácil extenderla (pero sólo unos 10-20 segundos aproximadamente). Procurar rellenar sin llegar hasta el mismo borde del bizcocho.

Una vez extendida la mermelada, vamos a rellenar con nata. Con la ayuda de una espátula, extendemos una capa generosa, sin llegar al borde del bizcocho. Como este bizcocho sólo eran 2 capas, la nata sólo la he puesto en 1. Una vez rellenado el interior del bizcocho, lo tapamos y volvemos a tener el bizcocho completo. Cogemos un poco más de nata, y con la espátula, la repartimos por los bordes, pero sólo una capa fina, que se deje ver el bizcocho. Y con algo más de cantidad, cubrimos la superficie superior. Si nos animamos, podemos poner la nata en una manga pastelera y con boquilla rizada (por ejemplo), decorar toda la parte superior. Pero este modo con la espátula y procurando dejar la superficie superior lisa con la nata, es la forma más sencilla si tenéis poca práctica en la cocina o no tenéis manga pastelera y boquillas.

Ponemos un par de cucharadas de cacao en polvo en un colador (el cacao del chocolate a la taza va genial) y espolvoreamos toda la superficie superior del bizcocho que hemos cubierto con la nata. El chocolate al contacto con la nata, oscurecerá y tomará sabor. Poner una buena capa de chocolate, que esté bien cubierto. Decorar con los ositos de chocolate o la decoración que hayamos elegido. También podemos dejar la nata de la capa superior con ligeros picos hacia arriba, que quedarán muy bonitos sólo cubiertos con el chocolate en polvo.

Meter la tarta en la parte más fría de la nevera, hasta que vayamos a comerla. Sacar un poco antes de servir, para que pierda algo de frío, pero es necesario que esté en la nevera hasta ese momento, para evitar que la nata se baje. Sólo queda servirla y disfrutar. ¡Buen provecho!

Foto resumen de esta rica tarta


Un primer plano del bizcocho ya horneado. Fijaros en todas las burbujas
pequeñas de la masa, fruto de todo el rato que hemos batido.


El bizcocho ya frío y separado en dos mitades.


Fijaros la miga tan suave que tiene.


Rellenar cada mitad del bizcocho con mermelada, 
para que quede más jugoso.





Utilizar una mermelada (sino es casera) de buena calidad,
y si tiene tropezones de fruta, tanto mejor.


Tras la capa de mermelada, vamos a poner otra de nata, 
pero sólo en una mitad (la de la base del bizcocho).


Detalle de los ositos de nube de chocolate que puse
para la decoración superior.



La tarta espolvoreada con el cacao en polvo y lista para 
meter en la nevera hasta el momento de disfrutarla.









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